Muchos dudaban de nuestra capacidad, muchos nos han acusado de oportunistas, pero algunos empiezan a tener nervios y se han tirado a la calle. Creemos que las mareas son buenas, siempre que estén controladas, la gente conservadora no solemos hacer mucho ruido, somos conscientes de la situación que vivimos y afrontamos los retos con optimismo, cuando uno hace mucho ruido se arriesga a que este deje sordo al interlocutor.
No recordamos una campaña tan popular en nuestro municipio, todos se vuelcan en dar besos y palmadas, eso sí, algunos más que otros, lo que sí es cierto, es que hasta ahora no habíamos tenido presencia en las calles ni la población sabía de nuestra capacidad.
Estamos contentos de la aceptación de los castellarenses, nos escuchan, nos critican y nos aportan maneras de ver la situación desde muchos puntos de vista.
Es de agradecer sus comentarios, algunos, no coinciden con nuestros colores, pero agradecen nuestra franqueza, se han dado cuenta que los de la otra acera, sí, esos que están gobernando, huyen de sus raíces y hasta de sus "colores", sí Sr.Ignasi, el color rojo ha pasado a ser morado y parece el de los "brotes verdes" cuando se seca.
Ahora solo nos dejan ver a su candidato, por que el miedo se ha apoderado de sus posibles perdidas, y etse alcalde está haciendo la labor de proximidad con el ciudadano y por primera vez dedica 24 horas a su actual profesión.
Este fin de semana volveremos a la calle, nos veremos y aquellos que dieron soporte al Partido Popular han empezado nuestra mejor campaña, el boca oreja, el cara a cara, el comentario que más no han transmitido, "esperamos que tengáis fuerzas para encauzar este mal gobierno, este que no nos respeta"
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